miércoles, 27 de mayo de 2009




FESTEJO
Festejo tu cuerpo imprescindible
Despojado de saco y corbata, posmoderno,
Festejo en tu cálida bahía
Mi barca conocida, regresando a puerto
Festejo los relámpagos ametrallando el cielo
El brillo de tus ojos cuando ven el techo
Cuando ven un peregrino concienzudo en el cristal
Husmeando tenaz su derrotero.
Festejo el vaivén coordinado y cierto,
Las ansias del puñal lacerando el muerto
Profundamente en busca de tu nervio,
El latido que amenaza no ser y sigue siendo,
El llanto que da vida y no nos mata.
Festejo la explosión, presuntamente
Para la que he debido nacer esta jornada,
La estepa que se hace blanca en un instante,
Tu aullido de loba adentro de mi oreja.
Festejo la ostensible quietud, esa caricia,
Mi respiración desacompasada
Un segundo después que el alma se derrama.
Festejo tu dedo jugueteando en mis espaldas,
Los dimes y diretes del diablo y dios
Por nuestras almas.
El humo tras el fuego que se apaga,
El sudor y el sueño repentino
Argumentos de la muerte pero benignos.
Festejo cada día, cada instante
De todos los instantes en que estás conmigo.



LEVA COSANOVICH

3 comentarios:

MabelBE dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
MabelBE dijo...

Bueeenas Sergio. Ideal eso de "viajar bien parados en la tierra", que dificil, eh.
Pero, hay que ser ambiciosos.
Abrazo.

C@L dijo...

che... poeta.. releo lo tuyo y con más detalle, me dejo llevar..

(sólo una apreciación: yo en lugar de poner "adentro" usaría "dentro de mi oreja", es más fino y ritma mejor me parece) Fijate

Abrazo, siga.. siga... sigaaaa...