domingo, 9 de enero de 2011

FACILÍSIMO, OLVIDARTE.

Ya he bebido a tu salud, y vos, nunca apareciste.

Debajo de este árbol, protegiéndome de este enero bueno para garzas, en medio del tembladeral que suele dibujar una ausencia.

Desechada la idea de mi muerte…me dispongo a olvidarte.

Aprovecho para echar una mirada última a tu retrato.

Por todos lados cuelga, de aquél edificio, en la publicidad del tren que va pasando, en la tapa del diario doblado arriba de la mesa. De mis pobres retinas.

Me persigue, es una mosca que no se amedrenta.

Cierro los ojos y tapo mis oídos, pruebo a no respirar, me quedo quieto…y sin embargo…el olor de tu piel.

Voy a olvidarte, hoy es el día, borraré toda palabra de mi memoria, tus exageraciones, tus puntos de vista que me provocaban risa.

Pienso arrumbar en un rincón tu ropa de quiromante falsa, el sombrero con el que posaste para mí una noche, tus vestidos raros, multicolores.

Ya lo dije, será este mismo instante, ya mismo, ahora mismo…te olvido…te olvido…una vez más me esfuerzo…te sigo olvidando.

levacosanovich@hotmail.com